Tienen que traer la androginia.
Eso está claro.
Es la parte cumbre de la Obra, por la que llevan trabajando desde el comienzo de esta historia que se llama “Mundo”.
¿Pero cómo lo harán?
¿Cuál será el momento y la excusa para oficializar que el mundo tiene que abrazar ese ideal comunista?
No es un comunismo cualquiera o clásico.
Va mucho más allá de la igualdad económica y social.
Estamos hablando del momento final en el que la especie humana desaparece tal y como la conocemos.
Ya sabes, la desaparición del varón y la hembra.
Es más, la cosa va más allá de eso pues los seres por crear han de tener cualidades que podríamos considerar de dioses.
Tampoco puede haber animales, ni viejos o jóvenes.
Todo ha de estar conectado.
Todas esas cosas las sabemos.
¿Pero cómo lo lograrán?
Tendrán que hacerlo oficial un día.
Posibilidades para la llegada del humano andrógino (transhumano)
La parte más importante del caldo alquímico ya está en marca con la inoculación del ADN andrógino en las masas. Una inoculación que es obligatoria pero que como todos sabemos la intentan camuflar de voluntaria.
Sin embargo, no se puede eliminar a la humanidad actual así como así, sin tener una excusa irrefutable.
Hace falta algo más, algún acontecimiento futuro que justifique el último paso para la realización del Adam Kadmon.
De todas las cartas que están por ocurrir hay pocas que tienen la fuerza necesaria para poder justificar algo así ante el mundo.
¿Cuáles son esos posibles acontecimientos?
- La llegada de los aliens
- La realización de la Singularidad
- Una pandemia final (¿variante Omega?) que elimine la posibilidad de concebir naturalmente
- ¿Será una mezcla de estas?
- O ¿será algún otro acontecimiento?
1 La llegada de los extraterrestres (aliens)
Esta parece ser la carta final, y quizás la más importante.
La realización de que el humano no está solo en el universo. La misma prueba que hace que los hombres comprendan su total irrelevancia en el Universo material infinito.
Todo ello cuadra con el amor de la materia que han de profesar los humanos en el momento que se acepte la androginia, concepto que casa totalmente con el amor a la materia.
Ese acontecimiento tendría la fuerza para derribar totalmente el sistema como lo conocemos, no solo a nivel político o social, sino religioso.
Nadie – salvo los fanáticos cristianos – podría oponerse a unos seres tan increíbles como los extraterrestres.
Si esos seres nos dicen que los humanos deben renunciar a lo viejo y abrazar lo nuevo: el transhumano, pocos serían capaz de discutirlo.
Es un escenario que está ahí, pero aún así, parece que podría faltar algo en el guión.
No sé, quizá me equivoque.
2 La realización de la Singularidad
La fusión del hombre y la Inteligencia Artificial, o más bien debería decir la realización de que la IA ha alcanzado la conciencia y, por tanto, el humano no es la especie dominante.
En un escenario así los humanos no tendrían más remedio que obedecer a este ser superior y aceptar la asimilación en el universo virtual que a buen seguro les tendrá preparado.
De esa manera el ser humano podría aceptar que tiene que convertirse en una especie transhumana (andrógina) para poder seguir viviendo de manera armónica en la Tierra.
Curiosamente algunos conocen a este momento como “Omega”.
3 Una pandemia destructora de la posibilidad de procrear de los humanos
Este es el escenario que podríamos denominar “Utopía”, en honor a la serie británica de hace unos años, aunque va más allá del simple “reducir la población mundial a 500 millones de habitantes”.
El tema es mucho más profundo que una simple reducción de la población.
Pero no cabe duda que una súper-pandemia, que bien podría ser con una variante final de la plandemia CV19, que bien podría ser la Omega.
De cualquier modo, fuera cual fuera el virus o mutación causante, una pandemia de ese tipo, con un escenario parecido a “Los hijos de los hombres” llevaría a la humanidad a una situación desesperada en la que tendría que buscar una solución.
Esa solución sería dar el poder total al Estado para que intente engendrar y salvar a la humanidad.
Se podría dar el caso que el Estado y los científicos dieran con una solución que tuviera que ver con el internet de las cosas, la nanotecnología y básicamente la conversión del humano en un ser diferente, por supuesto, bajo la guía de la ONU, la OMS o y el Foro Económico Mundial, sería un humano “perfecto”, es decir un humano comunista. Y qué mejor humano comunista que uno que no tenga sexo, raza o edad.
Si a eso le unes el momento de la Singularidad, y más tarde la llegada de los “extraterrestres” para salvar al mundo de la catástrofe de la procreación y de una guerra de exterminio nuclear, entonces nos quedaría un escenario perfecto para tener lo que se dice una bienvenida a la androginia por todo lo alto.
Y así lograría el Diablo la conversión masiva del mundo en demonios.
Sin embargo, no podrá conseguir todas las almas.
Algunas se le escaparán.
Hay almas que no están dispuestas a abrazar la androginia, por muy bonita que se la pinten.
Algunos humanos decidirán escapar al Cubo.
La única manera es hacerlo siguiendo a nuestro Señor Jesucristo.
Eso solo se consigue por la fe.